9 prácticas que mejoran la función cerebral, la memoria y la concentración
Si bien su inteligencia está determinada en parte por factores genéticos y por el tipo de entorno que tenía cuando era más joven, todavía hay cosas que puede hacer para mejorar su función cerebral. Algunas técnicas lo ayudan a mejorar su memoria, otras perfeccionan sus habilidades de resolución de problemas y, aún más, simplemente mantienen su cerebro en excelente forma para que se mantenga alerta a medida que envejece.
Aquí hay nueve de las mejores prácticas para mejorar la función cerebral. En consecuencia, estos ejercicios para mejorar el cerebro también podrían aumentar su potencial de manifestación.
1. Mantenerse hidratado
Si quieres estar listo y listo para el día, asegúrate de beber un par de vasos de agua en los primeros 30-60 minutos después de despertarte. ¡Después de todo, dormir implica hasta ocho horas sin ninguna nueva ingesta de líquidos! Por lo tanto, es lógico pensar que su cuerpo estará un poco lento y deshidratado y que esto tendrá un impacto negativo en la función cerebral. Por ejemplo, la investigación sobre cognición en niños pequeños ha demostrado que aquellos que beben más agua son mejores para completar tareas intelectuales más complejas.
2. Uso de aplicaciones de entrenamiento cerebral o programas de audio
Su teléfono inteligente puede descargar cientos de aplicaciones diferentes que lo ayudan a perfeccionar algunas de sus habilidades mentales más importantes. Muchos de estos están disponibles sin cargo, y otros ofrecen algunas funciones de forma gratuita, pero solicitan el pago para desbloquear todas las actividades. Independientemente de la aplicación que elija, puede reservar fácilmente diez o quince minutos al día para trabajar en su memoria, habilidades matemáticas, vocabulario o reconocimiento de patrones.
3. Abastecerse de romero
El romero es un remedio herbal común para la mala memoria, ¡y solo su aroma puede mejorar la memoria potencial! Este es el tipo de memoria asociada con la organización de eventos futuros y la realización de planes.
Existe evidencia de que beber té de romero también puede ayudar a darle a su memoria un poco de energía extra. Puede hacer este té agregando solo una cucharadita de romero a una taza de agua hirviendo. Si no le gusta el sabor, intente agregar un poco de miel dulce para mejorar el sabor.
4. Hablar con personas inteligentes
Una nueva investigación fascinante sobre la naturaleza socialmente contagiosa de los hábitos indica que puede volverse más reflexivo, lógico y creativo simplemente pasando tiempo con personas que ejemplifican estas virtudes. Trate de empujar regularmente la conversación más allá de lo superficial, también. Haga el esfuerzo de mantener su cerebro activo debatiendo asuntos actuales u otros temas que inviten a la reflexión. Cuando la conversación se mantiene en la superficie, su cerebro no se ve desafiado o excitado en las formas que promueven el crecimiento.
5. Jugar juegos
Aunque parezca demasiado bueno para ser verdad, ¡jugar un juego favorito en tu teléfono inteligente o computadora puede ser bueno para tu mente! Los estudios demuestran que mejora la neuroplasticidad, siempre que no dediques todas tus horas de vigilia a los juegos. Cuando se compara con otras formas de recreación (como pasar sin pensar por los canales de televisión), los juegos mantienen la mente ocupada y lo alientan a procesar más información nueva. Para obtener los beneficios de los juegos y el entrenamiento mental, busque aplicaciones de entrenamiento cerebral que lo ayuden a aprender nuevas habilidades mediante juegos.
6. La siesta
Lejos de ser perezoso, la siesta está científicamente probada para ayudar a mejorar la concentración. También puede aumentar la productividad cuando alcanzas una meseta de capacidad intelectual.
Los estudios sobre la siesta sugieren que aumenta la velocidad de reacción y ayuda con el aprendizaje; las siestas proporcionadas no duran más de 20 minutos.
Por el contrario, los sueños más largos le permiten caer en un sueño profundo. Esto podría hacerte sentir desorientado y aturdido cuando te despiertes.
7. Lectura de ficción
Si alguna vez ha sentido que realmente está experimentando los eventos descritos en una novela, hay explicaciones neurocientíficas sólidas para esto.
Específicamente, las imágenes de resonancia magnética del cerebro muestran que cuando te sumerges en una historia ficticia, tu cerebro reacciona como si realmente estuvieras viviendo los acontecimientos de la vida del protagonista.
Como consecuencia, se ha comprobado que la lectura mejora su capacidad de empatizar con los demás. Del mismo modo, amplía tu vocabulario y te ayuda a ejercitar el lado creativo de tu cerebro.
8. Beber té verde
Si confía en la cafeína para un poco de impulso cognitivo, considere cambiar a té verde en lugar de su café habitual. Además de aumentar su tasa metabólica y potencialmente ayudarlo a perder peso (si es necesario), el té verde le proporciona un poderoso aminoácido llamado l-teanina. Las pruebas neurológicas muestran que este aminoácido aumenta la actividad de las ondas cerebrales alfa. En consecuencia, esto le ayuda a concentrarse sin ponerse nervioso o ansioso.
9. Meditando
Finalmente, si pasa algún tiempo en actividades de atención plena o visualizaciones creativas, le complacerá saber que estas prácticas meditativas ayuda para hacerte un mejor pensador. Lo entrenan para concentrarse por períodos más largos, bloquean nuestra información irrelevante y ejercen más control sobre sus respuestas a situaciones estresantes. Si aún no estás haciendo tiempo para meditación, sepa que solo 10-15 minutos por día pueden crear cambios medibles en la estructura de su cerebro en solo unas pocas semanas.